El sábado 8 de septiembre, precisamente festividad de la Natividad de la Virgen María, más de cien niños y jóvenes de los equipos de Fútbol Base de Yecla subieron hasta el Santuario de la Patrona para encomendar la temporada a la Virgen y ofrecerle un centro de flores.
En el Santuario se realizó la presentación de cada equipo: los alevines, los dos equipos infantiles, los dos juveniles, y los dos de cadetes.
Se proclamó un pasaje de la primera carta a los Corintios (1Co 9, 24ss) en el que San Pablo pone en comparación las carreras o deportes con la vida de fe: «Sabéis que, en una carrera, todos corren pero solamente uno recibe el premio. Pues bien, corred de tal modo que recibáis el premio. Los que se entrenan para competir en un deporte evitan todo lo que pueda dañarles. Y lo hacen por alcanzar como premio una corona de hojas de laurel, que en seguida se marchita. Nosotros, en cambio, luchamos por recibir un premio que no se marchita.»
A continuación los asistentes rezaron la Salve, ofrecieron sus flores a la Virgen, cantaron el himno y para finalizar todos pasaron por el camarín de la Patrona a besar su manto y pedirle su protección.