Diecisiete ministros extraordinarios de la comunión, más las tres Hermanitas de la Anunciación que también colaboran en este servicio.

En dos ámbitos desarrollan su misión los ministros extraordinarios. El principal y más importante es el de llevar la comunión a los hermanos de la comunidad parroquial que por diversas circuntancias están impedidos. Para este fin tenemos establecidos turnos semanles, de tal forma que todos los domingos por la mañana tras la misa de 10, dos ministros mas las tres hermanas llevan a Jesús Sacramentado a más de cuarenta enfermos. Enfermos que por otra parte son visitados mensualmente por los sacerdotes de nuestra parroquia, preocupándose por su estado y ofreciendo el sacramento del perdón de los pecados.

La otra labor de los ministros extraordinarios es ayudar a los sacerdotes, cuando sea necesario, a distribuir la sagrada comunión en la celebración de la Eucaristía. Para este fin también se organizan turnos de servicio, especialmente para los fines de semana, donde la afluencia de fieles es mayor.